Episodio 50

Angela Uyen

Belgica

Ubicación

Médica arequipeña, trabajo con comunidades en zonas excluidas en el Perú. En el 2010 se unió a Médicos sin Fronteras, con quien tuvo la oportunidad de trabajar en proyectos de salud en países del África, Asia, Medio Oriente, América Latina y el Caribe. Volvió a Perú a hacer una maestría en control de enfermedades infecciosas en la Universidad peruana Cayetano Heredia, realizó algunas consultorías con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y volvió a las filas de médicos sin Fronteras. Tiene un MBA, una maestría en Relaciones Internacionales y Ciencias Políticas por la Universidad de Queen Mary de Londres, ha vivido en Reino Unido, India, Nepal, Brasil, Venezuela, el Congo, Siria y mucho más. Actualmente, es asesora de políticas de salud y médicos sin fronteras en Bélgica, manejando una cartera de aproximadamente 12 países y viendo temas en financiamiento de salud, tuberculosis, preparación para epidemias y pandemias, cambio climático, salud, entre otras. Hoy hablamos con Angela Uyen.

Canciones de fondo: Girl on fire (Alicia Keys), Valicha, Vulindlelbrenda (Fassie)

Entrevista

Ana: Hola, Angela, bienvenida a Granadilla Podcast ¿Cómo estás?

Angela: Hola, Ana, gracias, y qué honor llegar a este episodio, número 50, gracias

Ana: No, gracias a ti, yo estoy muy emocionada como te contaba antes de hacer la grabación porque, pues nunca pensé llegar a 50, así que estoy superemocionada, estoy como una niñita así internamente celebrando y ya esperando que también salga en el podcast este episodio. 

Pregunta 01 – 01:57

Ana: Me gustaría comenzar preguntándote por tu trabajo en Perú, porque al final somos peruanas que estamos en el extranjero, pero todos empezamos en Perú ¿Y cómo es trabajar en zonas que están excluidos o que están alejadas en el Perú?

Angela: Sí, de hecho, esas son de las experiencias que más me marcaron, además de que fueron las primeras después de salir de la universidad, en los primeros trabajos, yo creo que muchos médicos empezamos con experiencias similares porque vamos a hacer el SERUM y al serumista le dan más puntos, para después para hacer especialidad, mientras más alejada la zona, y luego de ahí empecé a trabajar con iniciativas como médico itinerante y demás, y lo que te puedo decir es que te abre los ojos, te abre la mente a una realidad que a veces nos parece tan lejana, que si vamos a algunos lugares, a veces vamos como turistas, compramos un chullo, vemos de lejos, pero otra cosa es vivir ahí, intercambiar con la población, conocer sus problemas, entender cuáles son las brechas enormes que separan a una Lima superurbana o incluso en la Lima periurbana  y te te lleva a entender mejor lo que es la inequidad, lo que son esas diferencias, como peruano puede ser tan diferente de otras 10 personas que no tenían DNI, no entendían el concepto de ser peruano y pertenencia al país, me decían, “bueno, es que yo pertenezco a la Comunidad, 2 de mayo…” y este es mi sentimiento de pertenencia y ya está, entonces uno no solo adquiere el conocimiento médico, porque ves enfermedades que solo vi una vez en el libro y de pronto viene una persona y bueno, de pronto es lepra y yo decía “La lepra… ¿Eso no está en la Biblia?”, he visto eso alguna vez

Ana: Escuela Dominicana

Angela: Claro, las monjas de los sagrados corazones me decían que la lepra, pero no, aparte de la parte médica está el idioma, las historias, leyendas urbanas, es una experiencia muy, muy rica, pero también un shock enorme, el ser peruano no te brinda, no nos brinda a todos las mismas oportunidades

Ana: Importante lo que mencionas, porque es cierto, hoy en la situación política que vivimos, en la plena pandemia nos damos cuenta también de esas diferencias que hay, es muy importante ir cortando esas brechas, porque al final, como tú dices, no se saben peruanos, se saben miembros de la Comunidad, miembros de cierto Grupo tal, pero no, pero ahora si la idea es que todos nos identifiquemos y recibamos los mismos beneficios

Pregunta 02 – 04:36

Ana: y bueno, tú eres médico y de pronto alguien que escucha este episodio es médica o le interesa el mundo de la salud, entonces yo también siento curiosidad por Médicos sin fronteras,  entonces, ¿cómo ha sido el proceso de unirse? ¿Cuál es tu experiencia hasta ahora? ¿Cómo ha sido todo esto, todo este proceso?

Angela: A ver, Médicos sin fronteras es mucho más que un trabajo, es que la asistencia humanitaria, decimos siempre una vez que uno entra, es una droga, no sale,  la asistencia humanitaria es muy específica, es como llevar salud en cualquier lugar, a veces van a poblaciones y hacen una campaña de salud de un día, no, hablamos de mudarnos a un lugar, hablamos de entender el contexto geopolítico, social, económico, entonces es de verdad, sumergirte un poco en la realidad para poder entender a quienes están dando asistencia, muchas veces y tenemos que tener una un acoplamiento cultural, por ejemplo, si tú estás en Siria, vas a vestir una burka, si tú estás en Afganistán, te vas a cubrir, si tú estás en India, te vestirás, no con un sari necesariamente, pero sí tienes que adecuarte culturalmente, aprender un poquito del idioma, a tratar de llegar a la gente, entonces es mucho más que un día de trabajo, es una forma de vida, por otro lado, está el cómo aplicar, yo al principio decía, “Guau, yo quisiera ser como estos médicos que viajan, mira, voy a ir a ayudar a los niños” y claro, y uno siempre piensa que es una vida muy sacrificada, pero también hay muchas recompensas, las emocionales,  de cuando por fin ese paciente que se te iba, salió, también hay, porque uno sale también a conocer, a hacer un poco de turismo, disfrutar, te haces miembro de la Comunidad, entonces no es todo sacrificio y yo creo que esto del “salvador Blanco” que va y ayuda, esa es una imagen que tratamos definitivamente de rechazar, uno va a ser un trabajo como médico y también tiene muy buenos momentos, no solo es una vida de sacrificios, ahora sí es cierto que para aplicar hay algunos requisitos, por ejemplo, saber inglés y francés es un superplus, tener muy buena base de enfermedades tropicales o epidemiología y de salud pública y sobre todo también tener un poco de resiliencia, en cuanto a salud mental y estar bien adaptándose a contextos de muy bajos recursos

Ana: Interesante, o sea, hay que tener bastante preparación y también estar abiertos a lo que pueda pasar, porque como tú dices, no es “El Salvador Blanco” y yo vengo de trabajar con una ONG que tiene operaciones en Etiopía y también intentamos combatir eso, el típico “hombre blanco” que viene y él soluciona todos los problemas y ahora todo es hermoso, que no es así porque en realidad, ni el hombre blanco puede, a veces el hombre blanco tiene problemas y la otra parte también de la flexibilidad y de qué habilidades tienes tú para ofrecer para el campo, entonces, los que nos están escuchando ya saben, tiene que prepararse si es que Médicos sin fronteras es lo suyo, hay que prepararse bien para dar

Pregunta 03 – 01:37

Ana: Bueno, un tema de gente y que tú también eres especialista, es el tema de la pandemia que estamos viviendo ahora, y ya no es tanto la falta de vacunas, sino que es la gente que no se quiere vacunar, el gran problema, entonces yo te contaba antes que tenemos un familiar que de pronto está muy así, no antivacunas, está como que “Ay, nos restringen los derechos humanos” y “oye, relájate un poquito, que aquí nadie está violando tus derechos humanos”, y  a veces tenemos, de pronto los que nos escuchan en este episodio tiene un familiar, un amigo o amiga que está en contra de las vacunas y en contra esas restricciones que están poniendo para los no vacunados ¿cómo podemos combatir esto? ¿Qué podemos hacer? ¿Qué recomendaciones tienes para manejar esta situación?

Angela: Yo creo que simplemente importante, primero, evitar crear brechas, es decir “amiga, los antivacunas y aquí, yo, con el conocimiento”, hay que evitar las etiquetas que creo que en este caso, en covid es muy específico, porque si bien hay grupos antivacunas, esto lo vemos con sarampión y con otras vacunas, en COVID hay a veces preguntas y dudas muy legítimas, como está de “oye, ¿cómo hicieron tan rápido y no han podido parar el VIH?, y¿por qué a ver y por qué este?, en Haití salió una variante y por qué necesitamos más shots”, tienen preguntas legítimas, que yo creo que la primera, la primera cosa importante, es escuchar, es escuchar las dudas, las preguntas, hay que estudiar y hacer investigación y es ahí donde creo que hay que tener equipos multidisciplinarios, gente de sociales, sociólogos, antropólogos, no hay que medicalizar la pandemia, los médicos tenemos un alcance bastante limitado, entonces esto tiene que ser multidisciplinario y tenemos que aprender en cómo llegar a la gente, conocer sus dudas, entenderlas para poder resolverlas, para poder resolverlas también con un alcance multicultural, porque no tenemos el mismo entendimiento de lo que es salud, enfermedad, bienestar, cada cultura tiene su propia cosmovisión, como le llamamos de la salud, entonces tenemos que adecuar el idioma, el lenguaje, todo, el mensaje a estas poblaciones, pero primero tenemos que entender, y si no los escuchamos, de nada me sirve que yo ponga 1000 propagandas con gente vacunándose, si yo no entiendo cuáles son las preocupaciones de estas personas

Pregunta 04 – 09:55

Ana: Interesante, muy bueno lo que dices y respecto, creo que también, o sea, colabora en contra el tema de las fake news y ahí jugamos un papel muy importante, los comunicadores porque el periodismo a veces rebota la noticia o entrevistan a cualquier persona y a veces lo sensacionalista pega más que lo informativo bonito, ordenadito, uno prepara su reportaje bien lindo y ese no pega, pero el que trajiste, como 5 personas que son sensacionalistas, esa le da la vuelta a las redes sociales ¿A ti te ha tocado combatir algo del tema de fake news?

Angela: Muchísima, sobre todo cuando uno está expuesta a redes, te ponen que a ti te paga Soros

Ana: Yo estoy esperando que Soros me pagué el billete por Granadilla podcast, pero no me da ni un sol hasta ahorita

Angela: Estamos esperando hace 2 años, y eso no es nuevo, desde antes que ocurriera, antes ya ocurría, ya sea que defendiéramos alguna política de vacunación por otro tema o de alimentación saludable o de lo que fuera, la anticiencia está muy expandida, y hoy en día la gente, los gobiernos y las organizaciones han perdido legitimidad, entonces la gente no sabe ya en quién confiar, no confía en el Gobierno, no confía en la OMS, no confía en la ONU, con todos tiene esta desconfianza, entonces, buscan respuestas en las redes

Ana: Sí, el poder de las redes, mi esposo está contra las redes sociales por esa razón, porque dice “Ay, todos y todos se vuelven de locura y es una bolita de nieve”, así que bueno, los que nos están escuchando, pueden seguir también a Ángela en Twitter, porque ella siempre comparte cosas muy interesantes e importantes respecto a la salud en general y ahora con el tema de la pandemia

Pregunta 05 – 11:30

Ana: Y volviendo un poco al tema de tu trabajo con Médicos sin Fronteras, yo sé que has estado en diferentes misiones y de hecho, que cada misión tiene un espacio especial en tu corazón y en tus experiencias, pero de hecho, hay una que te marcó más y me gustaría que me cuentes sobre eso

Angela: Es una pregunta superdifícil porque sabes que los seres humanos vamos cambiando con el tiempo entonces, cada una me ha afectado en distinta manera y cada una me ha tocado en distinta manera y ya las últimas han sido mucho más de pronto, maduras y con otro approach, pero entonces yo creo que me iría la primera, la primera experiencia,  la que te deslumbra y es que la primera vez porque yo me fui y me acuerdo, que yo me fui y me llevé las botas de escalador y pantalón campero, y así preparada como un Indiana Jones a Puerto Príncipe y para esto, Haití antes del terremoto y después del terremoto tenía tal cantidad de ONG de todo el mundo, era un circo de ONG, yo lo que me encontré un circo de ONG, ONGs de todo tipo y en la noche, la vida nocturna era el club, el bar, el no sé qué y yo vestida como Tom Rider, y decía hoy “OK, no estaba lista para esto” y entonces te vas dando cuenta un poco también, y te llegas también a decepcionar mucho de lo que puede ser este circo del desarrollo y la acción humanitaria, lo bueno es que MSF tenía muy claro en donde y en donde no, porque la población te mira, la población de mira estés donde estés y yo creo que, por ejemplo, hubieron casos de escándalos de gente de Naciones Unidas y abusos que se cometieron, sexuales o contra la población, y entonces teníamos muy claro, lugares que podíamos visitar y lugares que definitivamente no visitamos, esto era muy importante, yo creo que Haití, porque aprendí también lo que era el humanitarismo, estas discusiones tan interesantes como lo que decimos del “El Salvador Blanco” y la población o ¿Cómo podemos estar más cerca de la Comunidad?, en una situación en la que tampoco confiaban en nadie, nosotros, por ejemplo, no tenemos armas, pero estábamos en Cité Soleil, que es una parte donde hay muchas armas y mucha herida de bala y muchos secuestros y es super caliente, pero MSF no usa armas ¿Cómo se protege? Se protege con la confianza de la población, entonces lo nuestro era de palabra, entonces “miren, estamos aquí para brindar ayuda humanitaria, somos solo médicos y tararará”, entonces aprendía todo eso, me pareció tan fascinante y con gente muy experimentada. Entonces yo creo que Haití fue muy para mí, fue mucho aprendizaje, mucho aprendizaje de golpe y repetí, misión y repetí, misión y repetí, misión y nada que ver, quedando por más de un año sin tenerlo pensado

Ana: Qué interesante, como tú dices, a veces las primeras veces son las que te marcan más, y ya te imagino, pues vestida de Tom Rider en la mitad y todo el mundo con sus vestidos y tú ahí con tus pantalones, entonces que aprendimos, que en tu primera misión siempre hay que llevar un vestido por si acaso, un par de vestidos, un par de zapatos bonitos, por si sucede, pasa que hay en la fiesta, importante la lección

Angela: los llevé a la misión siguiente y me fui al centro del Congo, donde nunca hubo nada, en donde pudiera usar

Ana: Pasaste de un montón de fiestas a ninguna fiesta, pero bueno, siempre están como si acaso, ya por si acasito, uno nunca sabe, ahí en el bolsillo chiquito de la maleta, metemos un vestido

Pregunta 06 – 15:22

Ana: Y bueno, actualmente vives en Bélgica y eres la primera peruana que tenemos en Bélgica, aquí en Granadilla podcast, así que eres la número 50, eres la número 1 en el tema de Bélgica, así que me gustaría que nos cuentes justamente qué diferencias o similitudes hay con la cultura peruana?, porque de hecho la cultura peruana es tan fuerte, que vas a otro país y sientes como que “oye, pero las cosas se hacen así en Perú” y te dicen, “bueno, acá no”, entonces ¿cuáles han sido esos choques culturales que hemos tenido que sobrepasar?

Angela: Siendo ya más de 10 años que no estoy en Perú, pocas cosas me causan en shock cultural de Europa, menos, yo creo que Perú dentro de toda nuestra América Latina, se parece mucho al sur global, en otras latitudes, de pronto más parecidos a los africanos a los asiáticos del sur, creo que los trópicos tienen una cosa en el corazón, los ritmos, la alegría, ese ofrecer, luchones y el trabajo, es muy fuerte, es muy tangible la lucha de día a día en el sur global, ahora aquí, que puedes ser lo que me has dicho, que los largos inviernos, los fríos enormes, como la gente, yo me parece hasta ahora increíble, algo que me sorprende todavía y seguirá sorprendiéndome es cómo pueden salir las chicas con minifalda cuando hay 0° y las veo en el tren y yo digo “tenemos que ser diferentes, de todas formas, hay algún gen”

Ana: Tenemos que hacer un estudio del ADN

Angela: Hay algo ahí, que yo digo “¿Cómo pueden?”, pero dentro de todo yo creo que donde estés, en el mundo los humanos somos tan iguales, al final, nuestros miedos son los mismos, nuestros sueños son los mismos, entonces las culturas sí son una parte superficial que de pronto, tan formal como hablamos, como nos explicamos, cómo nos vestimos, que cantamos, que comemos, pero adentro del cascarón, somos tan iguales todos, entonces yo creo que eso también, hay que conocer a la gente un poquito más profundo, más allá desde la cartera, me encanta de aquí la cultura de la cerveza, es que no te estoy diciendo que me encante la chela necesariamente, aunque sí, pero sí, la cultura de la cerveza, porque la gente toma, pero hay tantos tipos de cerveza y los conocen y se apasionan y te cuentan que tal tipo y tal tipo y de verdad son muchísimas, entonces tener los museos de la cerveza, el Festival de la Cerveza en la etiqueta, todo una oda a la cerveza en general

Ana: Interesante, aunque en Bélgica también son las papitas fritas

Angela: Eso me parece increíble, no es la comida típica, mi mamá vino ya, “mamá, te voy a llevar a comer” y “¿cuál es la comida típica?” le digo “Ah, unas son las papas fritas y otras son los choros”, y tal cual, o sea, los choros son los bulls, te lo sirven y te dan un balde, mi mamá, decía, “son choros”, “sí, mamá”, pero cuestan un montón y son riquísimos comer, es muy rica la comida, pero sí lo de los papas fritas también lo es, pero son ricas de verdad las hacen diferentes, son muy crujientes, largas y una cantidad de salsas, uff, ni el Miguelon

Ana: El Miguelon se quedó atrás, así que ya saben, las mejores papas, tienen que cruzar el océano para ir a Bélgica por las mejores papitas fritas. Acá en Israel se ha puesto de moda estos negocios, porque te lo venden en un cono, te lo dan en un cono con papitas y acá no hay mucha variedad de cremas, en Perú hay más variedad de cremas, por ejemplo, pero igual, tu conito y te ponen un cosito al costado, te ponen 2 o 3 cremas y vas con tu conito como si vas a comer un helado, pero vas comiendo papitas, recién acá hay cada vez más tienditas que venden sus papitas fritas por acá

Angela: La influencia belga

Ana: Sí, sí, hay una comunidad belga por acá, han venido con sus conitos desde Belgica, y nos están invadiendo con sus papas fritas

Angela: Que lleven chela mejor

Ana: También eso, acá no falta la chela, así que si quieres hacer un montón de chelas, estás invitado acá a Israel

Angela: Ay, muchas gracias

Pregunta 07 – 20:00

Ana: Y bueno, por último, antes de terminar este episodio que estaba muy muy divertido ¿Qué mensaje le dejarías a aquellas peruanas que están pensando en ir?, porque muchas, pues como yo, en el momento salieron del país por estudios, dijeron, voy a hacer una maestría o doctorado, una especialización que sé yo y otras como yo se vieron en la pregunta de “Oye, la persona con la que me voy a casar vive en el extranjero y me pidió que viva con él”, entonces ¿Cuál ese consejo que le dejarías a aquellas o ese mensaje a aquellas que están pensando migrar, que tiene que tomar la decisión o quiere realmente migrar?

Angela: Yo creo que emigrar, ya sea por trabajo o por estudios, por buscar un futuro mejor, o sea, la razón que tengan, por amor, pues lo que tengan detrás, no es fácil, no es fácil porque es dejar atrás todo lo que conoces, todo lo que quieres, incluso si en el momento sientes que no, ya no quiero más esto, en algún momento vas a escuchar una canción, vas a recordar un poquito, quieres hablar tu idioma, extrañas a tus viejos, es dejar mucho de ti atrás, que lindo que el señor de la bodega te conozca, yo qué sé, entonces no es fácil, van a pasar por miedo, soledad, incertidumbre y hay que estar listo, pero creo que todo esto va pasando con el tiempo, conforme uno tenga una red de contactos, las redes de contactos son muy importantes y entonces comenzar a hacer amistades, atreverse, porque al final, como yo decía que los seres humanos no somos tan distintos, entonces, atreverse, bueno, es que de pronto no hablo el idioma, bueno, trata, trata de verdad que hoy en día tenemos tantos tutoriales en YouTube, a veces pensamos “no tengo la platita para pagar para estudiar”, hay muchos recursos gratuitos hoy en día, podemos estudiar idiomas, poquito a poquito, en muchos países hay grupos de expatriados y muchos están aprendiendo el idioma y muchos países, creo que en todos los países debe haber latinos, entonces ayudarse y tener una red de contactos, yo creo que es sumamente importante involucrar sin mezclarse, absorber el idioma y lenguaje, la comida, tratar, yo creo que hay que ser un poco intrépido, salir de la carcelita y tratar, es sumamente importante que mantengamos nuestros sentidos porque es fácil meterse en un cascarón y no querer salir y decir, bueno, yo aquí he venido a estudiar, yo aquí he venido a hacer tal cosa y yo creo que hay que disfrutar la vida, porque se nos va rapidito y por qué tantas cosas maravillosas allá afuera, sabores nuevos, olores nuevos, cosas que nunca imaginamos, entonces hay que salir a explorar

Ana: Totalmente de acuerdo con Angela, y muchísimas gracias por estar con nosotros aquí en Granadilla Podcast y que la sigas rompiendo en Bélgica

Angela: Muchas gracias, Ana y muchas gracias por la oportunidad y felicidades por el cumpleaños 50

Ana: No es cumpleaños, para los 50 años de Granadilla podcast puede encajar ese pedacito

Angela: Me llamas para los 50

Ana: Te llamo, obvio que sí, gracias.

Hemos llegado a la Peruana número 50 rompiéndola en el extranjero y hay muchas más que están por venir para contárnoslo, Granadilla Podcast se está tomando una pausa técnica para volver con fuerza en el 2022, mientras tanto, si escuchas este audio antes del 18 de diciembre, este sábado a las 3:00 p.m., hora de Perú, tendremos el primer conversatorio “Peruano migrante: retos y aprendizajes” te esperamos en el canal de FB RandomAna y si lo escuchas luego del 18, busca en el anal de FB o Spotify la grabación.