Episodio 28

Lisette Balabarca

Estados Unidos

Ubicación

En el 96 ganó una beca para viajar a España y asistir a un curso de Literatura latinoamericana en la universidad de Alicante, el curso era de 6 semanas y se quedó 2 más para viajar y conocer no solo España, sino también Francia e Italia, siempre tuvo la idea de viajar a otros países para estudiar y apenas salió la convocatoria, postuló y se la dieron. Una profesora de la Facultad de Literatura de la Catolica la recomendó para la escuela de literatura hispánica de la Universidad de Boston, fue aceptada con beca completa que le pagaba pensión, matrícula y un pequeño sueldo bajo la modalidad de Teacher Fellowship. En el 97 se muda oficialmente a Boston y sus 8 años ahí los describe como lo mejor que le ha pasado. Llegó a Boston en agosto de 1997, empezó con la Maestría en Literatura Hispánica, luego siguió con el doctorado, para el 2006 consigue su primer trabajo como profesor asistente de una clase de español en una universidad de Maine, a 4 horas de Boston, cerca a la frontera con Canadá, estuvo 5 años en este puesto, en el 2011 consiguió un puesto a tiempo completo como profesora de Español en Siena College y vive actualmente en Nueva York, hoy hablamos con Lisette Balabarca.

Canciones de fondo: Invierno limeño (Olaya Sound System), Tu falta de querer (Mon Laferte), Cheap thrills (Sia) y Girls just wanna have some fun (Chromatics).

Entrevista

Ana: Hola, Lisette. Bienvenida a Granadilla Podcast.

Lisette: Hola, Ana, bienvenida.

Ana: Excelente. Son los nervios de la cámara (risas) ¿Cómo estás, Lisette?

Lisette: Muy bien, muchas gracias por tenerme aquí en tu programa, me parece excelente esta iniciativa de tu podcast.

Ana: Muchas gracias, Lisette, por aceptar ser parte de este proyecto y a los que nos escuchan, si eres una peruana que la está rompiendo en el extranjero, es momento de avisarme.

Pregunta 01 – 02:31

Ana: empecemos, cuéntame de tu experiencia, yo sé que tu primera experiencia académica fue en España, España de hecho porque hablamos el mismo idioma, es muy parecido, pero de hecho debe haber diferencias entre ambos países, me gustaría que me cuentes un poquito de eso.

Lisette: Bueno, sí, yo saqué una beca que se llamaba Intercampus en el 96, fue una beca que creo que ya no existe porque fue como un intercambio entre estudiantes de España y de Perú, pero bueno, esta beca era con la universidad Católica (PUCP), entonces fui en febrero de 1996 y estuve ahí 6 semanas, era un curso de 6 semanas y me quedé más tiempo para viajar y la verdad es que con España no hubo realmente un choque cultural porque como dices el idioma es el mismo, pero sí es Europa, entonces yo al principio decía “Estoy en Europa, pero, por otro lado, me era muy familiar, porque la arquitectura es muy similar, el idioma, las costumbres son un poco parecidas pero también hay muchas cosas diferentes, por ejemplo, la comida es algo que es muy diferente o para mí que nunca había salido del Perú, los sabores son diferentes, nosotros usamos más condimentos, todo tiene más sabor, en cambio, en la cocina española tiene otro tipo de cocina, entonces me costaba un poco, por ejemplo, en el almuerzo que nos daban en la universidad, ellos no comen arroz y una está acostumbrada a comer arroz.

Ana: A todo le metemos arroz.

Lisette: Sí, entonces te daban pan o todo lo servían con papas fritas, el desayuno, por ejemplo, comen muchas de estas bollerías, estos pancitos dulces y yo estaba acostumbrada a comer mi pan con mantequilla.

Ana: Tu pan con tamal.

Lisette: Claro, tamal los domingos, salado, entonces esas cosas. También, por ejemplo, yo estuve en Alicante que es una ciudad muy bonita, más o menos sur, digamos en el mediterraneo y no había mucha gente, es una ciudad pequeña, bueno, en ese momento no había tanta gente, entonces era fácil. E sistema de transporte público que mencionabas antes sobre Israel, funciona muy bien, es muy diferente a como es en Perú, es todo más ordenado, más fácil moverte, si quieres viajar por ejemplo, yo que estuve viajando por España es más fácil llegar a un lugar, tienes casetas de información, en ese momento no había internet, no se usaba tanto, entonces siempre en la estación de tren o de buses había una caseta que te informaba hoteles, a donde podías ir, o sea todo, todo, para qué llegarás y empezarás a recorrer, a caminar, y eso me pareció super bien, a mí me gustaría que eso pasará en Perú, que hay ahora, pero no cómo hacerlo fácil y otra cosa también que se podía caminar mucho, se puede caminar en España mucho, hay transporte público, pero la gente camina mucho, entonces cuando uno camina va conociendo mucho. Luego otra cosa que también es una diferencia cultural es que entre las 2:00 p.m. y las 5:00 p.m. de la tarde todo está cerrado.

Ana: Se van a tomar la siesta me han dicho.

Lisette: Sí, o sea si tú llegas a las 3:00 p.m de la tarde y quieres comer algo, no hay, a menos que sea en Madrid, ahí si hay, en Barcelona, lugares donde hay mucha immigración entonces un chifa está abierto, de comida india puedes ir, pero digamos los negocios, cerrado. El horario es algo a lo que te tienes que acostumbrar, por increíble que parezca. Luego, en la universidad era parecido, muy parecido, lo que me di cuenta era que la biblioteca de la universidad, de la Catolica (PUCP) tenía más cosas que la Universidad de Alicante, pero en esa época, claro, en el año 96, hace muchos años, eso ha cambiado seguro, pero era muy similar, quizá los cursos eran algo diferentes, aunque yo fui al programa de filología hispánica porque yo estaba estudiando Literatura en la Católica, entonces habían muchos cursos de cosas españolas, pero de cosas latinoamericanas había muy poco, o sea al curso que yo fui, creo que era el único, un curso de literatura latinoamericana, entonces yo fui porque para la beca tú tenías que dar una presentación sobre un autor y yo escogí Sor Juana Inés de la Cruz, una monja mexicana que escribía poesía y ensayos filosóficos en el siglo XVI en México y hablé un poco de eso y yo asistí a la clase, pero el profesor era super buena gente porque los españoles son muy relajados, entonces yo le decía me quiero ir a conocer Sevilla y me decía: “Vete, no te preocupes, no tienes que estar en la clase, aprovecha, conoce”.

Ana: Qué buen profesor.

Lisette: sí, super relajado y yo me moría de vergüenza, pero era así esa experiencia aunque fue breve, habían muchos chicos latinoamericanos que estaban ahí por la misma beca de intercambio, entonces conocí gente de México, Brasil, Colombia, también habían algunos de Estados Unidos que estaban ahí por otras becas y fue muy bonito porque sales, es otro mundo, es diferente hay otras personas, muchas culturas porque en ese momento ya había mucha inmigración en España, entonces conoces gente de muchos lugares que yo no pensaba que iba a conocer gente así, y formas de ver el mundo, de relacionarse, de viajar, mucha gente viaja en Europa, es muy fácil, no era tan caro, o sea depende, pero pude viajar en un bus, los trenes también funcionan bien, entonces a mí esa facilidad me gustó mucho, que después volví a Perú y el tráfico.

Ana: El tráfico de Lima.

Lisette: Pero, por otro lado, yo me di cuenta de que viniendo de Lima, de Perú, que yo soy de Lima, de todo ese caos, el tráfico, la bulla y todo, ir a un lugar en donde no existe eso, o sea el tránsito es fácil, es más fácil adaptarse a eso, porque yo creo que viniendo del caos es más fácil adaptarse al orden y me ponía a pensar qué sería al revés, pobrecitos.

Ana: Claro, si cuando mi esposo iba a Lima a visitarme, es como que él maneja acá y no quiere manejar en Lima porque es terrible, yo estoy aprendiendo a manejar acá en Israel y no hay forma humana que yo maneje en Perú, me llevan el carro, me llevan a mí y se acabó la gracia, de hecho tienes razón, del caos a la calma es más fácil que de la calma al caos. 

Pregunta 02 – 11:10

Ana: Y mencionabas que compartiste aulas con alumnos de Estados Unidos y justo hoy vives en Estados Unidos y fue por una beca que llegaste a Estados Unidos, me gustaría que me cuentes un poco de ese proceso para explorar y ser aceptada en Estados Unidos, cómo funcionó, si aún está vigente ese tipo de becas.

Lisette: Sí, yo cuando volví de España, yo quería salir del Perú, quería regresar a España, quería hacer una Maestría o un Doctorado en España o en Francia, quería ir a Europa, entonces me puse a buscar y no había tantas becas, digamos podían aceptarte en la universidad, pero sin pagarte, sin dinero digamos, porque normalmente no es tan caro hacer un doctorado en España, pero la vida, ya tú tienes que buscártelas, en ese momento hablé con una profesora mía de la católica y le dije que necesitaba una carta de recomendación para una beca que estaba postulando en España, entonces ella me dijo: «Sí, te hago la carta» y justo tengo un amigo en la Universidad de Boston y es peruano y me ha pedido que le recomiende alumnos peruanos porque no hay para la Maestría de Literatura y le dije: sí, recomiendame, me recomendó, entonces hice todo el papeleo que es postular a la Universidad, en realidad solo postulé a esa universidad y a una universidad en España y llené mis papeles, luego te ponen a hacer el tofen, que es el examen del idioma inglés, me puse a estudiar, yo estudié el inglés en el colegio, pero para prepararme tomé clases particulares, porque el examen, no sé cómo será ahora, pero era bastante largo, comprensión oral, entonces me preparé mucho, también tienes que hacer lo del iar que es como un examen de ingreso de aptitud verbal, yo iba a letras así que tenía más peso la parte verbal que la parte numérica, y lo hice todo muy rápido porque ella me aviso un poco tarde, entonces yo tenía a las justas para mandar, normalmente las solicitudes se mandan como en enero y te avisan como en marzo o abril si te aceptaron o no, para empezar en setiembre, porque las clases en Estados Unidos inician en Setiembre, entonces lo hice todo muy rápido y me aceptaron lo de España, me aceptaron a la universidad, pero no tenía ningún tipo de beca, así que en la universidad de Estados Unidos tienen una cosa que para Maestrías y Doctorados ellos te dan becas que se llaman  Teacher Fellowship o  Teacher Assistant y te dan un dinero con el que te pagan la matrícula, la pensión y te dan unos cursos, en el caso de lenguas, te dan un curso de español, para dar un curso a los chicos, los de pregrado, si eres de otras carreras te dan una especie de jefe de prácticas, acompañas al profesor. Bueno la posibilidad económica era muy buena, entonces me aceptaron, yo nunca había estado en Estados Unidos, solo había estado en el aeropuerto de Miami de camino a España, no sabía, ni tenía idea a dónde iba, un amigo me dijo te vas a Boston, Boston es una ciudad superbonito y yo sí, mira será, ya me habían aceptado, yo ya me iba. Yo llego una semana antes de que iniciaran clases porque ellos te dan una orientación de cómo son las clases, orientación para los estudiantes internacionales y luego la cuestión de buscar dónde vivir, Boston es una ciudad muy cara, las ciudades en general en Estados Unidos son bien caras, pero es una ciudad llena de universidades, está ahí Harvard, está MIT, hay mucha gente de muchos países y también muchos universitarios, doctorado, maestría, también pregrado, entonces había mucha oferta de alquileres de departamentos, pero eran caros, entonces yo conocí a una chica española y un chico peruano que me presentó el profesor, que era el contacto de mi profesora, nos contactamos y buscamos un departamento juntos, los 3, entonces compartiendo departamento era mucho más fácil pagar. Pero para mí esa era una experiencia total, yo vivía con mis papás, me quería ir hace un tiempo, pero no tenía plata y de pronto vivir sola, en otro país, con otro idioma, y la cuestión de la lengua es difícil, aunque yo hablaba inglés, entender lo que la gente te dice más rápido… Bueno, encontramos este departamento y luego era ir a comprar todo, la cama, la chica española ya había hecho la maestría en otra universidad americana, entonces ella sabía, me ayudó. Y allí empezó, haciendo la maestría y como extra una maestría en español, porque yo fui a hacer una maestría en literatura hispánica y luego continúe con un doctorado en literatura hispánica, entonces las clases eran en español y la tesis la podías hacer en español o inglés, entonces por ese lado fue bastante cómodo, porque la gente que hacía la maestría conmigo y luego el doctorado era gente de diferentes países de Latinoamérica, de España y americanos que hablaban español, entonces nos comunicábamos en español, fue muy bonito, para mí era como una familia, la verdad yo sé que no todo el mundo tiene esa experiencia porque luego he conocido gente que no tuvo la misma experiencia en la escuela graduada, pero en mi caso sí, conocí gente de Colombia, México, Chile, Argentina, España, Puerto rico y americanos que hablaban superbién el español y el intercambio cultural fue muy rico, nos ayudábamos, y  cuando llegaba alguien nuevo a la maestría o al doctorado le ayudábamos, le dábamos una mano, por ese lado estuvo todo bien, por el lado académico también estuvo bastante bien, en Estados Unidos las bibliotecas son inmensas y tienes la posibilidad del préstamo interuniversitario, el Interlibrary loan, tú pides un libro que necesitas para un trabajo y ellos te lo traen, si no lo tienen lo piden a otra biblioteca.

Ana: Qué buenazo.

Lisette: Entonces no había excusa para no hacer la tarea, entonces por ese lado era estudiar, me pagaban la matrícula, la beca incluye eso, la pensión y aparte yo tenía que dar una clase de Español y eso para mí era completamente nuevo porque yo aquí en Lima, en la Católica era jefe de prácticas de Lengua y Literatura, pero luego dar Español era diferente, ahí si tuve problemas el primer año porque te enfrentas con chicos americanos, tienes unos coordinadores que se juntan con los profesores y con los estudiantes graduados y nos daban el material y todo, pero ahí por ejemplo, en Estados Unidos, en las universidades tú tienes que darles todo como que muy señalado, la información tienes que darles muy señalada y yo que venía de Lima donde la universidad es un poco tu libre albedrío, creo que ahora ha cambiado, pero en ese momento no te explicaba todo, tú te las buscabas, pero en Estados Unidos no, tenías que dar todas las instrucciones muy claramente, explicarles absolutamente todo, porque luego si ellos no te entienden, se frustran o algunos no te quieren preguntar, yo por ejemplo, tenía problemas de comunicación porque yo les decía hagan esta tarea, pero yo no les explicaba por qué no sabía, cómo lo iban a hacer, qué era lo que yo les estaba pidiendo, entonces ellos no leían y yo me enojaba un poco y aunque ellos hablan el inglés, para comunicarte hay que aprenderla forma en que se dice y en Estados Unidos todo tiene que ser muy cortez, por ejemplo yo le decía a una chica “siéntate” entonces luego en las evaluaciones que hacían los estudiantes decían “la profesora es muy tosca” “es rude” y yo “qué”  entonces tienes que decirles “por favor, te podrías sentarte?” que yo no manejaba porque acababa de llegar y yo solo decía lo que sabía, luego eso yo ya lo aprendí, mis profesores me lo explicaron y bueno, funcionó mejor.

Pregunta 03 – 22:48

Ana: Bueno es un proceso, como vas adecuándote a la cultura, y bueno, hablando de choques culturales, tú entraste a Boston, pero luego te fuiste a Maine, y es gracioso porque por ejemplo, yo he vivido toda mi vida en Lima, pero me mudé 4 años a Trujillo por trabajo de mi papá y luego regresé a Lima, y a pesar de que Lima y Trujillo son ciudades costeras, son peruanas, hubo un mini choque por la forma como funcionan las cosas en Trujillo, como funcionan en Lima, y tú me comentabas que también hubo un choque entre Boston y Maine, me gustaría que me cuentes cuál fue ese choque y también, de las ciudades que has vivido en Estados Unidos ¿cuál es tu favorita y por qué?.

Lisette: Bueno sí, cuando terminé el doctorado en Boston me puse a buscar trabajo, entonces encontré un trabajo a tiempo completo en una universidad en Maine, Maine es un estado al norte de Boston, un estado muy grande, la universidad donde yo trabajaba y vivía estaba a 4 horas de Boston al norte, entonces estaba muy cerca a Canadá, entonces en esa zona, bueno en Boston en toda la costa este de Estados Unidos hace mucho frío, en Boston hace muchísimo frío, en Maine hace 3 veces más frío de lo que hace en Boston, nieva muchísimo, muchísimo, las temperaturas pueden bajar a 20 bajo cero en el invierno, enero, febrero, entonces y me fui para allá, me mudé, 4 veces por semana estaba en Maine y los fines de semana me iba a Boston porque ahí estaba mi ex pareja y compartíamos un departamento, entonces yo volvía y en Maine, donde estaba la universidad los alquileres eran muy baratos, entonces alquilé un departamento pequeño y era la mitad de lo que me costaba el departamento en Boston que yo compartía con mi novio, pero fue porque en Boston hay gente de muchos países, hay mucha cultura, mucha gente que habla con acento el inglés, entonces aprendes, muchos restaurantes también. Pero Maine, donde yo estaba sobre todo, que es el centro de Maine, hay mucha menos gente, es un estado relativamente pobre donde hay mucho espacio, pero no hay tanta gente, y la gente es la mayoría es gente que es de ahí y no hay mucha diversidad cultural ahí, ni racial tampoco, entonces era como vivir la experiencia americana realmente en ese momento, porque por ejemplo, es una ciudad donde yo estaba y no había buses, toda la gente tenía auto o había taxis, entonces yo no manejaba en Lima, no aprendía a manejar.

Ana:  Yo tampoco aprendí a manejar en Lima.

Lisette: Y en Boston era fácil porque teníamos el metro, el bus, no tuve problemas, pero en Maine sí, un profesor, un colega era el jefe del departamento de Español me dijo “si tú o tienes un carro aquí, no tienes libertad de hacer nada, porque para todo es carro” entonces ahí me puse a aprender a manejar y eso también fue toda una experiencia porque no es como en Lima que compras tu carro y aprendes a manejar, allá necesitas el brevete, la licencia de conducir para comprar un carro, entonces yo no podía comprar un carro hasta no tener la licencia y no tenía cómo practicar, así que me metía a una academia y ahí me enseñaban, luego lo que si era con una amiga, un amigo que sí tenía licencia alquilábamos un carro y yo practicaba, pero fue muy difícil porque en Estados Unidos es un país donde las cosas están muy reglamentadas y los chicos aprenden a manejar a los 16 años y nadie, quizá un 10%, 5%, 6% de la población aprende a manejar a más de 30 años.

Ana: tú y 5 gatos más recién aprendiendo a manejar.

Lisette: Entonces, claro, yo iba y los que me enseñaban se turnaban y era una academia y me miraban y me decían práctica en el auto de tu esposo, mira el machismo ahí, “yo no tengo esposo” y mi novio tampoco manejaba porque era peruano y tampoco manejaba, entonces no teníamos autos y era un poco gracioso eso, pero me causaba mucho estrés porque  yo quería practicar y no tenía cómo y necesitaba manejar y no sé cómo, practiqué y practiqué y al final me dieron la licencia y ya, empecé a manejar, bueno y a diferencia de Perú, allá, en estos sitios más alejados de la ciudad el tráfico es mínimo, las carreteras son enormes, los estacionamientos son super amplios para estacionar, entonces estando en Maine yo no tenía ningún problema para manejar porque tenía espacio, no me gustaba mucho ir por carretera, pero tenía que hacerlo para movilizarme y ahí ya cambió mi vida porque yo me pasé 6 meses tomando taxi para ir al super, para tomar el bus e ir Boston, entonces eso cambió, eso fue un choque cultural, porque también era una cuestión que en el trabajo yo no tenía muchos amigos y yo volvía a mi casa y estaba ahí viendo la tele, no salía mucho porque no conocía gente, era dificíl, había muchas familias y como te digo hacía mucho frío en el invierno, la nieve era terrible y eso creo que es lo peor, lo que menos me gusta. Donde yo vivo ahora también hace mucho frío, pero después de tantos años yo no me he podido acostumbrar al frío, ni a la nieve porque para mí es horrible, o sea es muy bonita la nieve cuando la ves.

Ana: O sea desde la ventana de tu casa.

Lisette: sí, pero cuando tienes que salir y hay mucha nieve, y en Maine eso pasaba siempre, los carros quedaban cubiertos de nieve. 

Ana: Claro y tenías que desenterrar tu carro.

Lisette: Sí, desenterrar y ahora también lo hago en Albani y es super pesado y esas cosas es un ah, qué hago aquí.

Ana: Sí, suele pasar, el tema de la nieve, o sea yo he visto antes la nieve en un cerro, en un monte, tanto en Lima como en Israel, pero este año en febrero vi por primera vez la nieve caer y no nieva mucho, acá en Jerusalén nieva un día y medio a lo mucho y exagerando y es como que 3 cm, 5 cm de nieve, entonces yo salí emocionada, casi me saco la michi, casi me resbalo, fui con mis botas y salí a media noche, le dije a mi esposo “quiero armar mi muñequito de nieve” y mi esposo “te vas a morir de frío” y yo “quiero mi muñequito de nieve” y se me congelaban las manos, no podía y había niños que sí estaban armando su muñequito de nieve como si nada, pero ellos han crecido acá toda la vida, y yo estaba con mis guantes que son esos típicos de lanita que paso toda el agua de la nieve y los dedos congeladísimos y ya no pude hacer ni la cabeza del muñeco de nieve porque me congelé tanto que dije “ya no quiero” y me volví al cuarto. Y repito, nuestro carro que tenemos, la luna quedó con un poco de nieve, pero nunca como las fotos que ves en Estados Unidos que tienes que salir con tu pala a desenterrar, tengo un amigo que vive en Nueva York y me dice “mi carro está enterrado y tengo que ir al super, no sé qué hacer” tranquilamente te pasas tu hora ahí limpiando tu carro para siquiera avanzar un poquito, de hecho que se entiende el choque que ha habido.

Pregunta 04 – 31:30

Ana: Y cuál ha sido tu ciudad favorita entonces en los Estados Unidos.

Lisette: Para mí, mi ciudad favorita ha sido Nueva York, la ciudad de Nueva York porque es una ciudad grande, para mí es como estar en Lima, pero en Estados Unidos, con las grandes diferencias que hay en Estados Unidos y perú, porque hay mucha gente, a mí me gustan las ciudades, entonces Nueva York hay mucha gente, hay muchas formas de pasear, de tomar el metro o el bus o caminar, puedes caminar muchísimo, hay mucha diversidad cultural, racial, hay gente de todos lados, hay comida de todos lados del mundo, también hay muchos centros culturales, espectáculos, creo que hay diferentes barrios que cada uno tiene su particularidad, tiene su belleza, son interesantes, a mí me gusta mucho, cuando voy me emociono digo “hay que lindo” es una ciudad muy cara, eso sí, para vivir, me parece demasiado cara, yo creo que no viviría allí, solo porque los alquileres son muy caros, los departamentos son chiquititos, no creo que valga la pena pagar tanto, pero la ciudad en sí es mi favorita.

Ana: Interesante, tomemos nota para ir a visitar Nueva York gracias a la recomendación de Lisette.

Pregunta 05 – 33:14

Bueno, me contabas también que la chamba en la que estás actualmente justamente es porque asististe al Modern Language Association, me gustaría que me cuentes de qué se trata y porqué es importante asistir si lo nuestro es la Lengua y Literatura.

Lisette: sí, mira, el Modern Language Association es una asociación de lenguas modernas que abarca todas las especialidades de inglés, de español, francés y todas las lenguas extranjeras que no son inglés, Lengua y Literatura y Cultura y esta asociación tiene una reunión, una especie de congreso cada año, donde la gente, los profesores, los estudiantes van a presentar sus trabajos, pero también a buscar trabajo, lo que hace la asociación en este congreso, tienen una plataforma donde las universidades si necesitan, por ejemplo, un profesor de español con especialidad en literatura peruana o andina, como le llaman allá, entonces ponen el anuncio a través de esta página, de la Modern Language Association y allí las personas solicitan, mandan sus solicitudes y todo, luego en el Congreso, aunque creo que eso se hacía antes, ahora ya no por la cuestión del covid y todo eso, lo que se hacía era, digamos el congreso este año era en Philadelphia, porque va rotando en diversas ciudades de Estados Unidos incluido Puerto Rico, entonces Philadelphia contrata el centro de convenciones que es enorme y unos cuantos hoteles donde los que están buscando contratar a alguien va a Filadelfia y entrevista a todos los postulantes a ese puesto, entonces las entrevistas pueden ser en el centro de convenciones, ponen mesas en todo el centro de convenciones con números y los postulantes están esperando que les toque su número y los enrevistadores están esperando y da muchos nervios, todos muy arreglados.

Ana: Como el concurso de The Voice, vas y le cantas tu cv a un público.

Lisette: Sí, u otra modalidad también, que nunca lo había visto, que en los cuartos de hotel alquilan una especie de suite y te entrevistan en el cuarto del hotel y están 3 personas sentadas, una en la cama, otra en la silla, y tú en otra silla.

Ana: Qué loco eso.

Lisette: sí, es muy loco, entonces también te mueres de miedo porque estás en el pasillo esperando, escuchas que están hablando y luego esperas y salen y tú entras o tocas la puerta de la habitación, es surrealista, da mucho miedo, y esa es una primera entrevista y luego sacan un grupo pequeño y te llaman y te dicen has pasado a la segunda ronda donde te invitan a la universidad, al campus, tú vas y ahí solo eligen a 3 o 4 personas y en la universidad ellos te pagan el hotel, las comidas, el vuelo y eso también es super estresante porque es estar un día entrevistandote con todo el mundo de la universidad, con el decano media hora, luego con tal profesor y luego tienes que dar una clase y a veces también una charla sobre tu especialidad y al final del día te llevan a comer, pero es muy estresante y de ahi ya te responde si te aceptaron o no.

Ana: Es como el The Bachelorette, es como si al final consigues…

Lisette: Sí es un poco así, un poco esa idea, en Estados Unidos hay esta idea del Marketing, de marketearte, de venderte, hay todas unas guías que te preparan en internet, qué debes decir tus respuestas, como debes ir vestido, es así como que muy estresante, pero bueno, hay que hacerlo.

Ana: Obvio, es parte del proceso, si realmente quieres el proceso, tienes que pasar por todo ese proceso y si alguien está pensando en postular contacten a Lisette para que les de los tips, las fijas.

Pregunta 06 – 38:36

Ana: Y ya para ir terminando, porque esto es muy importante, tú llevas más de 20 años viviendo en Estados Unidos, obviamente visitando Perú y todo, pero la pregunta es ¿Te consideras más americana o peruana? y ¿qué es lo que más extrañas de Perú?

Lisette: Bueno, esa pregunta siempre me la hago, porque realmente no sé qué responder, creo que cuando uno vive fuera y tanto tiempo, yo todavía siento que tengo un pie en Estados Unidos y un pie en Perú, que no puedo desligarme, en Estados Unidos está mi casa, mi trabajo, todas mis experiencias, pero Perú está ahí todos los días, yo no solo vengo a Perú y trato de venir una vez al año, pero también las noticias, ahora es más fácil con las redes sociales, siempre estoy conectada y Estados Unidos es donde yo vivo, estoy acostumbrada a esa vida, entonces yo siento que estoy entre los dos, pero cuando vengo a Perú hay muchas cosas que me molestan porque ya estoy acostumbrada a la vida allá, por ejemplo, el tráfico, a mí me molesta el tráfico, pero creo que hay otras cosas que me molestan más que no hay en Estado Unidos y hay mucho en Perú, no sé por ejemplo, que la gente en el super y hay gente que viene y te llena las bolsas y luego viene otra y yo no digo “No necesito que me ayuden, lo puedo hacer sola” porque en Estados Unidos todo lo tienes que hacer tu solo, en realidad nadie te ayuda, y luego vienes acá y estamos los peruanos acostumbrados a que alguien te lo haga o que pagas y te lo hacen, a mí eso me abruma un poco y estoy acostumbrada a hacerlo sola y pienso que no es necesario y bueno,  es acostumbrarse a que las cosas son así en Perú, pero esas cosas me chocan, que antes yo no las notaba y yo ahí por ejemplo noto que estoy acostumbrada más a Estados Unidos. Y la comida que me preguntabas, bueno sí.

Ana: Yo no pregunté por comida, pero todas las peruanas siempre extrañan la comida, tú solita te has vendido, yo no he mencionado comida.

Lisette: Sí, bueno, no es toda la comida porque yo una cosa que aprendí cuando me fui a vivir a Estados Unidos fue que me gustaba cocinar y qué sé hacerlo bien, porque acá en Lima mi mamá me cocinaba, entonces hay cosas que yo puedo hacer, ají de gallina, cosas que sé hacer, hay restaurantes peruanos a los que he ido, pero hay un sabor que solo lo puedes conseguir en Perú.

Ana: Sí, es el amor de la casa, puedes llevarte todos los ingredientes de tu mismo Perú, recoger tu ají allí en la granja y todo y no va a saber igual afuera, por más que lo intentes, por más que sigas la receta de mamá, no te sale igual.

Lisette: No sé yo, es el agua, qué sé yo.

Ana: En un episodio no sé con quién hablamos y decíamos que es el agua del Perú que es le da el toque.

Lisette: Creo que es eso, entonces yo sí pienso que es el agua o el aire que tiene que ver, no lo sé, pero hay un sabor que no lo puedes reproducir, pero digamos que hay cosas que no hay en comida, por ejemplo la granadilla, no hay, a mí me encanta.

Ana: Acá tampoco hay, por eso es el nombre de Granadilla Podcast, porque no hay granadilla y es muy latino, muy peruana esa fruta y no hay o está muy cara, en Francia esta 14 euros el kilo, con 14 euros compro granadilla para mi casa para todo el mes.

Lisette: Allá, bueno en Estados Unidos yo nunca he visto granadillas, he visto chirimoyas, que no compro porque una chirimoya puede costar como 10 dólares, pero el único lugar que sé que hay es en Colombia, porque una vez fui a Colombia y tenían granadilla, entonces cuando llegó a Perú lo primero que compro es un montón de granadilla porque me encanta y sé que luego no la voy a poder comer. 

Ana: Voy a utilizar este pedacito de la entrevista para que sea el comercial de Granadilla Podcast porque yo también, en mayo que fui y ya existía Granadilla Podcast, le dije a mi mamá que haya granadillas en mi cuarto y había 1 kilo de granadillas esperando por mí, porque no hay, no es tan común en el extranjero.

Lisette: Y no hay y es una fruta riquísima.

Ana: Es buenísima, es tan rica, me voy a poner a llorar, me va a dar la nostalgia de la granadilla ahorita.

Lisette: Sí, entonces me gusta también la lúcuma, la fruta en sí no es como que me gusta, pero en helados, postres, jugos que eso tampoco hay en otros, no he visto, solo en Perú, creo que en Chile también hay, cuando voy a Perú busco helados, jugos, todo, porque venden a lúcuma en polvo, pero no es igual.

Ana: Claro, no es igual, acá venden las frutas congeladas, las destrozan y las congelan pero no es lo mismo, ahora que ha empezado la temporada de mango acá en Israel, no es el mismo mango grandote, jugoso que hay en Perú, a mi esposo le dije que me encanta el mango y fue y me trajo 3 mangos, y parecían unas peritas y yo le dije”qué es esto, esto no es mango, el mango peruano es grande, jugoso, dulcete, otra cosa” la fruta peruana es un éxito.

Lisette: Sí, porque allá hay mangos y los traen del Caribe, pero el mango es ese que te ensucias toda la cara.

Ana: Claro, tienes que chorrear, sino no vale.

Lisette: Sí, y es todo salvaje.

Ana: Claro, yo corté el mango y no ensucia nada, todo seco, pésimo  servicio, el mango tiene que ensuciar e irte a lavar porque te embarraste todito con mango, es la ley, está escrito en la constitución que te tienes que embarrar con mango.

Lisette: Claro, entonces eso por el lado de comida, pero hay otras cosas que extraño de Perú, que a pesar de todos los problemas que tenemos, caos hay mucha intensidad en Perú, la gente vive muy intensamente, a veces es demasiado, pero hay vida, tiene vida.

Ana: Nunca te aburres en Perú.

Lisette: Nunca te aburres en Perú, puede ser que sea demasiado y estés en una constante situación de tensión.

Ana: Pero es parte de la rutina peruana, Israel si es un país intenso, pero una cosa es la intensidad local peruana, yo me despierto y empiezo a ver las noticias en Twitter y cuando mi esposo se levanta y me dice “ A ver qué ha pasado en Perú mientras dormíamos” y yo “Uy si te contará, por donde quieres que empiece” y me dice “todos los días pasa algo” y yo “obvio”.

Lisette: Nunca te aburres y eso es algo que yo extraño, porque en Estados Unidos no, bueno siento que no hay tanta intensidad.

Ana: Claro, no te identificas con ello de pronto, por ejemplo mi esposo es Israelí que lo entiendo, pero no es como mi drama peruano, que lo vivo, que está enlazado a la historia de dramas, es como que va enlazado definitivamente.

Lisette: Y esto es como que muy rico, no sé, eso lo extraño.

Ana: Sí, definitivamente creo que son cosas que se extrañan bastante. Y bueno, quería darte las gracias Lisette por estar en Granadilla Podcast, por contarnos tu historia, por tener ese momento tan chévere contándonos de la fruta que me ha puesto toda nostálgica, en septiembre voy a Perú y le voy a dar vuelta a la frutería con mis dos bolsas así de enormes, porque de hecho la fruta peruana siempre va a ser un éxito. Muchas gracias, Lisette, gracias por contarnos tu historia y que te siga yendo de lo mejor allá en New York.

Lisette: Gracias, Ana, y gracias por invitarme.

Ana: Por supuesto.

Lisette: La he pasado super bien y si es de ayuda para alguien aquí estoy.

Ana: Muchas gracias, Lisette, muchísimas gracias.

¿Cuál es tu viaje más significativo? No tiene que ser necesariamente internacional, solo piensa en ese viaje y si te produce alegría significa que estás lista para emigrar y dejar tu huella, trabaja por tus sueños, el mundo le pertenece a las peruanas.